Para la empresa latinoamericana, es importante considerar la realidad actual de la globalización si pretende permanecer y mantenerse en los exigentes mercados de la globalización. La realidad actual pretende respuestas rápidas al continúo cambio de las variables del mercado y no solo rápidas sino la entrega de productos ó servicios ajustados a los requerimientos del cliente del mercado que pretende satisfacer.
El comienzo de la gestión administrativa parte de una lectura apropiada del mercado objetivo ó cliente elegido para gestionar sus necesidades, demandas y expectativas. Las necesidades del mercado objetivo regularmente son “visibles” en tanto se pueden obtener de lecturas del mercado por medio de encuestas, análisis de mercado, estudio de tendencia del mercado, otros. Sin embargo, la clave de la competencia en el mercado es satisfacer aquellas demandas, necesidades y expectativas no manifiestas del cliente pero que se ajustan a requerimientos de este para ser interpretadas por el productor de bienes ó servicios. Al materializar esos requerimientos en un producto ó servicio será reconocido por el cliente a quién se dirige.
Identificar de manera integra las necesidades, demandas y expectativas del mercado objetivo debe ser propósito sustancial de la gestión administrativa. El resultado de este propósito será el posicionamiento de la organización productora de bienes y servicios en el mercado objetivo. Recordar que las necesidades y demandas del mercado son “objetivas” en tanto las expectativas son “subjetivas” (propias del segmento a quién se dirige el bién ó servicio).
En la globalización esas demandas, necesidades y expectativas del mercado cambian de manera constante, dependiendo del segmento de mercado a quién va dirigido el producto ó servicio, por lo que debe ser un propósito de las organizaciones el mantener una continúa lectura de este para interpretar de manera adecuada esas manifestaciones del mercado que regularmente son subjetivas no manifiestas sino en el acto de compra.
La interpretación de esta realidad de los mercados actuales establece una importante diferencia en la gestión administrativa: una gestión propia de la globalización de los mercados o una propia de mercados cerrados negados a la globalización actual.